Con las primeras grandes salidas
de vacaciones, los automovilistas deben tener cuidado con el uso de los limitadores de velocidad. Un estudio realizado por el Centro de investigación
neurocognitivas y neurofisiológicas (Ci2N) de la Universidad de Estrasburgo
señala “un deterioro de las capacidades de atención, y por lo tanto de reacción
frente al peligro de las personas que conducen un vehículo equipado con un
programador o un limitador de velocidad.”
Unas 90 personas han servido de
cobayas con un simulador de conducción. Los conductores tenían que efectuar, en
un simulador, un trayecto de 120 Km en
autopista, en cuatro escenarios (aproximación a un peaje, accidente de autocar,
obras en la calzada, presencia de un radar).
Esta pérdida de atención puede
tener varias consecuencias: “Con motivo de una velocidad más difícil de
modular, los conductores tienen tendencia a quedarse más tiempo en la vía de adelantamiento
y vuelven con menos frecuencia a la vía de la derecha”, explican los autores.
Así mismo, las distancias de seguridad disminuyen en una media del 5% antes de
salir de la fila y del 10% (unos 4 metros) en el momento de la vuelta al
carril.
Además, la conducción semiautomática
conlleva “un dominio más aleatorio de la trayectoria rectilínea del vehículo en
caso de utilizar el regulador ya que el conductor reajusta la posición de su vehículo
con menos frecuencia (menos 25%), lo que aumenta la amplitud de los reajustes
laterales”. Este fenómeno aumenta con la duración del trayecto.
En fin, “la capacidad de
reacción, particularmente en situación de emergencia, también disminuye
sensiblemente” precisa el estudio. El tiempo de reacción ante un acontecimiento
cualquiera (disminución de la velocidad, accidente) aumenta 1 segundo, o sea 40
metros añadidos recorridos a 130 Km/h antes de frenar. Además, unos
electroencefalogramas muestran que la frecuencia de episodios de somnolencia aumenta
en un 25% con un regulador después de una hora de conducción.
En estas condiciones, el profesor
André Dufour que ha dirigido el estudio, aconseja “desactivar el programador
cuando el trafico es denso, o al aproximarse a zonas específicamente señaladas,
tales como zonas de obras o los peajes. Una vigilancia acrecentada se impone
también durante los trayectos largos: la utilización de estos dispositivos
necesita aumentar la frecuencia de las pausas, para permitir al conductor
multiplicar los periodos de recuperación de su nivel de atención”. (Información)
www.leparisien.fr
Traducción: Noële Grente Lemullier
ASEXTRA Alicante
Muchas gracias por publicar ese estudio, totalmente coincidente con mi experiencia.
ResponderEliminarHace años que vengo recomendando evitar la utilización de los limitadores/reguladores de velocidad, son una trampa y están en la raíz de "inexplicables" accidentes.
Dejo dos enlaces que creo que amplían y completan esta información:
http://www.publico.es/espana/384818/trafico-aconseja-usar-el-limitador-de-velocidad
http://portalvasco.com/blog/?p=3196
Saludos cordiales.