La picaresca para evitar multas lleva a la Guardia Civil a peinar los talleres

Dos vecinos de Andújar y otro de Torredelcampo son los tres primeros  jiennenses a los que el  Grupo de Información de la Agrupación de Tráfico (GIAT) considera sospechosos de tratar de no pagar multas con excusas, como que su vehículo estaba averiado. El trabajo se puso en marcha tras un aviso de la DGT.

A esta investigación de la Guardia Civil jiennense se le pueden aplicar bastantes dichos populares españoles, todos sabios, como aquel de “lo barato, sale caro”, el otro de “es peor el remedio que la enfermedad” e, incluso, el manido, pero certero, “más vale prevenir que curar”. Las pesquisas están en marcha, desde hace aproximadamente dos semanas, y tratan de determinar cuántos conductores multados intentan librarse de la sanción con excusas variopintas, desde que su vehículo estaba averiado, hasta que lo habían vendido. Por ello, buena parte de esta operación les lleva a los talleres. A cargo del trabajo están los agentes del Grupo de Información de la Agrupación de Tráfico (GIAT), una mínima fracción del destacamento de guardias civiles encargado de las carreteras jiennenses, una parte de la Comandancia, importante de por sí, por tratarse la provincia de un nudo de comunicaciones. A estos agentes, que a diferencia de sus compañeros de las motos o los coches patrulla siempre visten de paisano y solo viajan en coches camuflados, les dio la pista para ponerse a trabajar la Jefatura de la Dirección General de Tráfico (DGT) en Jaén. (Noticia)

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