El Juzgado de lo Penal número 2 de Badajoz ha condenado a un hombre a siete meses y 15 días de prisión por negarse a efectuar la prueba de alcoholemia tras ser interceptado por un policía fuera de servicio cuando conducía ebrio marcha atrás, además de retirarle el carné de conducir por tres años.
Un año y medio por cada delito, ambos contra la seguridad vial, por conducir ebrio y negarse a someterse a las pruebas de alcoholemia legalmente establecidas.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, los hechos se produjeron el 12 de enero de 2012, cuando R.C.S. conducía un vehículo marcha atrás con las facultades físicas y psíquicas "muy disminuidas" por la previa ingestión de bebidas alcohólicas. (Información)
www.abc.es
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