La siniestralidad sobre dos ruedas ha sido uno de los principales caballos de batalla de la Dirección General de Tráfico (DGT) debido a que las estadísticas de accidentes de motocicletas o ciclomotores y de víctimas mortales en este tipo de siniestros no descendía. El refuerzo de las acciones de sensibilización han dado resultados positivos y en comparación con hace cuatros años, los motoristas fallecidos en las carreteras gallegas descendieron en un 47% al pasar de las 32 víctimas contabilizadas en 2009 a las 17 del año pasado, la misma cifra que en 2011.
A Coruña y Pontevedra lideran la clasificación en cuanto a personas que perdieron la vida en accidentes de motocicletas con 10 y 12 casos respectivamente. Aún así, desde 2009 en las dos provincias se ha reducido el número de víctimas: en un 30% en la provincia coruñesa y un 42% en la pontevedresa. La mayor bajada se registró en Ourense, que al bajar de siete a tres casos registró un 57% menos de muertos. Entre los motoristas lucenses también se ha notado esta tendencia a la baja y si hasta 2011 todos los años hubo tres víctimas en la provincia, en 2012 y también en lo que va de año el contador se mantuvo a cero.
El número de accidentes en los que se han visto implicados vehículos de dos ruedas también ha menguado en este periodo aunque en menor proporción. Se trata de 113 siniestros menos -de los 624 de 2009 a los 511 del ejercicio pasado-, lo que representa una caída del 19%. A Coruña es la provincia donde más se recortó la siniestralidad en motos, en concreto en un 37%, seguida de la de Lugo con un 30% menos. Pese a que en lo que se refiere a número de víctimas mortales sí que ha seguido la línea descendente, en número de accidentes Pontevedra apenas consiguió rebajar los 265 de 2009. Y en términos absolutos se sitúa a la cabeza a bastante diferencia de los 142 de A Coruña, los 62 de Ourense y los 44 de Lugo. En la primera mitad de este año dos motoristas perdieron la vida en la carretera -uno en A Coruña y otro en Pontevedra- mientras que desde enero se han producido más de 123 accidentes, el 42% en el área pontevedresa.
En la mayoría de los siniestros no hay que lamentar víctimas mortales pero muchos se saldan con heridos de diferente gravedad. Los 124 heridos graves en accidentes de moto el año pasado suponen la cuarta parte de los 163 de hace cuatro años. Pero en cuanto al número de heridos leves la cifra solo ha bajado en tres casos y se mantiene alrededor de los 330. En lo que va de año los casi 90 heridos leves contabilizados hasta el momento por la DGT representan prácticamente el doble de los que presentan heridas de mayor gravedad. (Información completa)
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