Huelga de funcionarios examinadores de Tarragona

Se cumple una semana de huelga de nuestros compañeros de Tarragona en protesta por las lamentables condiciones de trabajo en el que deben desarrollar su cometido así como las presuntas presiones con las que deben lidiar a diario.

Los funcionarios examinadores en huelga son 6 de un total de 10, lo que supone un porcentaje considerable de la plantilla. Conviene recordar que nadie se pone de huelga si no se trata de un caso extremo, puesto que esta postura, además de acarrear una merma en los derechos económicos de los huelguistas, supone un desgaste personal y profesional importantes.

Se quejan los funcionarios de la organización caótica del trabajo en la Jefatura de Tarragona, de la falta de comunicación de los jefes en relación a los cambios que se producen en la normativa y la ausencia de directrices sobre la aplicación de la misma. También se quejan sobre la supuesta falta de supervisión de la Jefatura sobre los elementos materiales y personales de las autoescuelas, habiendo, según ellos, una dejación en estas tareas lo que provoca enfrentamientos entre unas autoescuelas y otras con los funcionarios examinadores por medio.

Uno de los puntos que ocasiona también mucha controversia son las zonas de examen, que en la mayoría de casos están carentes de las más mínimas condiciones para realizar su cometido. Nos cuentan que están en terrenos aislados, sin servicios públicos, sin la más mínima infraestructura donde puedan estar los funcionarios o simplemente resguardarse de las inclemencias del tiempo.

Otra de las cuestiones importantes que les ha llevado a ver la huelga indefinida como única salida son las supuestas faltas de respeto por parte de algunos profesores de autoescuela, que al parecer pretenden influir en los resultados de los exámenes o incluso determinar los itinerarios a realizar ante la pasividad de la Jefatura Provincial de Tráfico. 

Conviene recordar que la elección de los recorridos de los exámenes es potestad exclusiva de los funcionarios encargados de la evaluación de las pruebas y deben ser itinerarios variados, de acuerdo al protocolo de calidad de los exámenes. Si las quejas son porque en algún punto falta señalización o no es la adecuada, los supuestos afectados deberían acudir al titular de la vía con el fin de que solucione los problemas y no cargar en contra de los funcionarios que únicamente están cumpliendo con su deber. 

Además, debe quedar muy claro que los resultados de los exámenes pueden ser recurridos mediante las formas que la Administración habilita al respecto y nunca in situ con supuestos gritos y malos modos. 

Los funcionarios están para cumplir las normas, de acuerdo a los criterios que marca la Dirección General de Tráfico y deben poder desarrollar su cometido sin presiones y en unas condiciones adecuadas de trabajo. Desde ASEXTRA apoyamos a nuestros compañeros y deseamos que se resuelva con prontitud el conflicto.

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