La Dirección General de Tráfico (DGT) espera reducir este
verano el volumen de exámenes prácticos pendientes de realizar a alrededor de
150.000 pruebas, lo que considera como una ‘bolsa’ adecuada para que las
autoescuelas puedan seguir operando, después de que la huelga de examinadores
de tráfico de 2017 provocara un incremento de alumnos que no han podido obtener
el carné de conducir.
El director general de Tráfico, Pere Navarro, indicó este
miércoles en Madrid durante la inauguración una jornada sobre autoescuelas
organizada por PONS Seguridad Vial que el Ministerio de Hacienda dio luz verde
la semana pasada a incluir el complemento específico en las nóminas de los
examinadores de tráfico.
Estos profesionales llevaron a cabo en 2017 la mayor huelga
de un colectivo de funcionarios en España, ya que la mayoría de ellos hicieron
paros durante 65 días de lunes a miércoles en demanda de un complemento
específico salarial de 250 euros en 14 pagas al año, una reivindicación que la
DGT llegó a trasladar sin éxito al Ministerio de Hacienda y Función Pública.
Fuente: diariosigloxxi.com
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