domingo, 25 de septiembre de 2016

Absuelto el padre que dejó conducir a su hijo menor al encontrarse él ebrio

El juzgado de lo Penal número 2 absolvió a un padre acusado de dejar conducir a su hijo menor de edad al encontrarse él en estado de embriaguez. Ahora la Audiencia de Pontevedra ha ratificado el fallo principal y y exonera a este padre de los delitos que se le imputaban.

Los hechos se remontan a noviembre de 2014. La Guardia Civil de Tráfico imputaba por varios delitos contra la seguridad vial a un vecino de Bueu de 41 años, Jesús Manuel G. M., después de que fuera interceptado el vehículo en el que viajaba en las inmediaciones de la AP-9, a la altura de Vilaboa, con su hijo menor de edad (tenía 16 años entonces) al volante y el progenitor ocupando el lado del conductor y visiblemente ebrio.

Este suceso derivó en dos procesos; por un lado contra el menor por conducir sin haber obtenido el permiso, asunto por el que tuvo que responder ante la Fiscalía de Menores, y otro contra el padre de este adolescente acusado de dos delitos de conducción temeraria, conducción temeraria y como inductor de delito de conducción sin permiso por parte del menor.

La Audiencia Provincial vuelve a señalar que no hay pruebas suficientes para concluir que el hombre tuviera "dominio funcional" sobre lo que estaba ocurriendo debido al "elevado índice de alcohol" que había consumido. Para el tribunal, la prueba de alcoholemia efectuada es un indicio de que pudiera estar muy afectado por el alcohol dado que fue de 1,25 y 1,35 miligramos de alcohol por aire expirado, es decir cinco veces más de lo permitido. Por lo tanto, cree que es posible que no pudiera tener control sobre la conducta de su hijo.

La absolución llega a pesar de la opinión del fiscal, que sostenía que, tal y como sospechaba la Guardia Civil, era el acusado quien aquel 6 de diciembre de 2014 conducía por la AP-9 a la altura del puente de Rande y en dirección a Pontevedra un vehículo Nissan Note que circulaba "zigzagueando" de tal forma que incluso provocó que algún vehículo tuviera que desviarse de su trayectoria para evitar colisionar con él. El fiscal mantenía, asimismo que luego había permitido o incluso alentado a que fuera su hijo menor el que cogiese el control del coche pese a no tener permiso para ello.

Fuente: Faro de Vigo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para hacer comentarios en el blog de Asextra, debes estar registrado.