La huelga, que tuvo una primera jornada de lucha el pasado día 2 con la salida a la calle de más del 90% de la plantilla del colectivo examinador, empezará su fase más dura a partir del 19 de junio, con huelga todos los lunes, martes y miércoles, en todo el territorio nacional.
Los funcionarios examinadores están expectantes y a la espera de la respuesta que van a ofrecer los organismos CECIR y DGT a este conflicto. No obstante, los examinadores han aprendido la lección de hace dos años y no se conformarán con buenas palabras y deseos. De hecho, en estos momentos, se está votando en el colectivo la continuidad del conflicto a partir de septiembre, posiblemente con huelga total e indefinida, por si la DGT que es el ente al que pertenecemos, no ofreciera soluciones adecuadas y perfectamente definidas.
Desde mediados de mayo que se convocó la huelga y se creó el comité de huelga, casi un mes después, aún seguimos sin ninguna propuesta. Si todo el colectivo y hablamos de más de un 90% está dispuesto a salir a la calle para protestar por su situación es que algo se estará haciendo mal por parte de los responsables de Tráfico.
Sentimos mucho los problemas que esta situación está originando a los ciudadanos que no pueden acceder con normalidad a las pruebas del Servicio Público de Exámenes, pero es que la gestión de los últimos años de este servicio estaba ya propiciando antes de la huelga, que las condiciones de realización de las pruebas estuviera siendo impropia de un verdadero servicio de calidad.
Los examinadores luchamos por mejorar nuestras condiciones laborales, pero también por la supervivencia de este servicio público de exámenes que está seriamente amenazado por las incomprensibles actuaciones que en el área de Recursos Humanos se han tomado en los últimos años y que están conduciendo a la imposibilidad incluso de dar el servicio en algunas zonas del país.
ASEXTRA
Espero y deseo que no haya detrás del deterioro del servicio, la idea del Gobierno decida privatizarlo.
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