Se espera que la Comisión Ejecutiva de la Comisión Interministerial de Retribuciones (CECIR) se pronuncie en los próximos días sobre las peticiones de los funcionarios.
Los paros convocados por los examinadores de Tráfico, previstos para los lunes, martes y miércoles a partir del 19 de este mes y hasta finales de julio, se producirían si el citado organismo dependiente de Función Pública no da su visto bueno al complemento específico reclamado por los funcionarios.
No es la única reivindicación de los examinadores, pero la impresión generalizada es que una respuesta afirmativa por parte de la CECIR sobre este asunto sería suficiente para desconvocar la huelga.
En caso contrario, el conflicto seguiría adelante. Se estima que los paros podrían afectar a unos 150.000 aspirantes a conductores. Según la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra), los funcionarios sopesan incluso la posibilidad de ir más allá y declarar una huelga total e indefinida a partir de septiembre.
La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) ha avisado reiteradamente de los resultados catastróficos que podría tener esta huelga en plena temporada alta, pues se causaría un perjuicio grande a los ciudadanos que necesitan obtener el permiso de conducir y a los centros de Formación Vial.
Los paros agravarían hasta extremos insospechados los problemas del servicio de exámenes de conducir de la DGT, muy deteriorado por la falta de reposición de las vacantes que se producen al jubilarse los examinadores.
Fuente:CNAE
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