Detenidos por dejar parte de la autovía sin luz al sustraer un kilómetro de cable

Dos avilesinos son los causantes de que parte de la Autovía del Cantábrico a su paso por la comarca se encuentre a oscuras. Al menos esa es la conclusión a la que ha llegado la Guardia Civil, que atribuye a a A. J. B., de 24 años, y L. J. B, de 31, el robo de más de un kilómetro de cable del alumbrado público de la A-8 en tramos que discurren por el Alto del Praviano (Soto del Barco) y Vegarrozadas (Castrillón). El Instituto Armado también considera responsables a los dos detenidos de daños en la línea de conducción de cable de un panel informativo de la Dirección General de Tráfico (DGT). El material sustraído y los daños causados han sido valorados en más de 8.900 euros. Ambos se encuentran en libertad con cargos tras prestar declaración ante el titular del Juzgado de primera instancia e instrucción número 6 de Avilés. También prestó declaración como investigado el avilesino I. J. J, de 28 años.

Sendos robos se cometieron a mediados de enero. Las investigaciones llevaron a los agentes a diversas empresas de reciclajes de metales de las zonas próximas al lugar de los hechos. La Guardia Civil localizó en uno de ellos unos 46 kilos de cable de cobre que había sido quemado y, posteriormente, vendido al peso y, que a simple vista podría corresponderse con el sustraído. Los técnicos del Ministerio de Fomento, a pesar del estado en el que se encontraba el material, lo reconocieron como el mismo que había sido sustraído en la Autovía. Una vez recuperado parte del material, los agentes centraron la investigación en localizar a las personas que vendieron el cable a la empresa de reciclaje, los cuales previamente lo habían pelado para dificultar s identificación. Así llegaron a los ahora investigados.

Estas indagaciones, comunicó la Guardia Civil, permitieron determinar también la implicación de estos detenidos en otros dos delitos ocurridos en agosto y noviembre de 2015: un hurto de 30 metros de cable de cobre de la conducción de las cámaras de vigilancia de la DGT en la Autovía del Cantábrico, a su paso por la Cruz de Illas (Castrillón) y otro de daños tras cortar una línea de conducción de cable de cobre que alimentaba un panel informativo de la DGT en esa misma zona. Estas actuaciones se enmarcan en un plan nacional contra el robo de cobre.

Fuente: La Nueva España