José Domingo González Castillo lleva 40 años trabajando en el sector de las autoescuelas. Presidente del consejo de administración de la Autoescuela María del Carmen de Benítez, abierta al público en el año 1953, en el Puerto de La Luz en Las Palmas de Gran Canaria, asegura que el nuevo examen «no afecta» sobremanera a la obtención del permiso de conducción. En la práctica, «la única novedad es que se fomenta la conducción autónoma» del alumno. «Los primeros diez minutos del examen práctico puede ir por donde quiera», sin otra indicación por parte del examinador que una dirección como meta del viaje, «con una ruta sin definir». Aunque también puede darse el caso de que el examinador le diga al aspirante a conductor que inicie la marcha y circule.
Lo que se pretende es que el examinado demuestre soltura al volante, cosa que desde las autoescuelas esperan que se logre. Así el alumno no se bloqueará ante las órdenes inesperadas del examinador. A ello se une que el futuro conductor deberá tener un conocimiento básico de mecánica. «No se trata de que sea un experto mecánico», asegura González Castillo, «sino de que en dos minutos demuestre que sabe revisar los niveles de aceite y agua del vehículo», si el nivel del líquido de frenos es el adecuado «y por dónde se pone». Pero en realidad la principal novedad introducida en este apartado es que «habrá de comprobar el dibujo del neumático». Cosas básicas que cualquier debería poder asumir. (Información)
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