Los requisitos impuestos por la administración para la autorización de celebración de pruebas deportivas asfixian a los organizadores hasta el punto que en algunos casos las carreras podrían llegar a suspenderse.
El que más agobia a estos organizadores es la necesidad de identificar a todos los voluntarios que van a colaborar en la realización de la prueba, con sus datos personales, el número del carnet de conducir y la ubicación exacta y sus funciones durante la celebración de la carrera dos meses antes de la celebración de la prueba.
A pocos días de que la Dirección General de Tráfico cierre el plazo para la solicitud de la autorización pertinente para las pruebas de carácter autonómico y provincial, previsto para el 10 de noviembre a fin de confeccionar un calendario oficial, el número de solicitudes se ha rebajado sustancialmente respecto a 2016.
En las diferentes reuniones informativas celebradas tanto por la Federación Aragonesa de Ciclismo como por la de Atletismo se ha puesto de manifiesto la necesidad por parte de las administraciones y de la Dirección General de Tráfico de ordenar la celebración de estos eventos para garantizar la seguridad.
El secretario de la Federación Aragonesa de Ciclismo, Óscar Muñoz, explicó que aunque a partir de ahora no hay grandes novedades, sino que "se hará cumplir el anexo de Tráfico" de una manera "exhaustiva" y se autorizarán las pruebas en función del número de guardias civiles que haya disponibles en ese momento den cada provincia y de cuántos se precise para la realización de dichos eventos.
Con esta premisa, las pruebas de ciclismo de montaña tendrían una consideración más laxa, ya que precisan de menos presencia de la agentes de la Guardia Civil de Tráfico y la autorización será "discrecional". No será así en las cicloturistas de carretera, donde es imprescindible la presencia de patrullas de la Benemérita.
En todo caso, el secretario de la FAC añadía que "se va a ser más escrupuloso en la calidad de la documentación que se presente. Antes valía cualquier cosa, y eso ahora ya no sirve".
Durante este año se ha solicitado la celebración de 160 pruebas en toda la comunidad autónoma, mientras que, a fecha de la semana pasada y a unos pocos días de que expire el plazo dado por la DGT, esta cifra no alcanzaba el centenar.
Carreras en el aire
El número de pruebas atléticas o de carrera por montaña también podría verse afectado por esta nueva situación. De hecho, el malestar entre los organizadores de las pruebas que integran el circuito de carreras de la Comarca de Gúdar Javalambbre es tal que incluso se plantean plantarse y no celebrar el torneo un año como modo de protesta. Mientras tanto, algunas de las carreras están, a día de hoy, en el aire al no poder los organizadores garantizar algunos de los requisitos que se exigen. El más conflictivo es la obligatoriedad de identificar dos meses antes de la celebración de las carreras a todos los voluntarios que van a colaborar en la organización, así como su ubicación durante el desarrollo de la misma sin que por el momento hayan recibido ninguna comunicación de que ese listado pueda modificarse según se acerque la fecha del evento. Un punto que "habrá que abordar en la próxima reunión del grupo de trabajo" creado para analizar este asunto, explicó el delegado del Gobierno de Aragón en Teruel, Antonio Arrufat, quien apostó por "aplicar el sentido común".
La consejera comarcal de Deportes de Gúdar Javalambre, Pilar Peña, señalaba esta semana, tras la reunión mantenida el domingo en Mora con los organizadores de carreras de esta comarca, que se están buscando medidas para hacer "presión" y que se estudie "hacer salvedades para que no se mida por el mismo rasero a los grandes eventos y a las pequeñas carreras que tenemos en la comarca".
En este territorio existe cierto malestar por la decisión de considerar como una prueba diferente las variaciones de menor recorrido que se hacen de las pruebas para dotarles de un carácter más popular.
El coordinador de Deportes de esta comarca turolense, Lázaro Vicente, aseguraba que "no entendemos muy bien el que dos meses antes tengas que identificar a las personas que van a estar colaborando en cada uno de los cruces. Sí que se deberían marcar pautas exigentes de obligado cumplimiento en los puntos en los que deba haber un voluntario, que constase en una memoria, pero no vemos la necesidad de que dos meses antes se conozca quién va estar en cada punto".
De la misma manera, y en coincidencia con la consejera Peña, Vicente reclamaba un trato equitativo para las pruebas en función de su magnitud. "No tiene ningún sentido que para una prueba de 749 corredores haga falta una ambulancia, igual que para una de 49; igual que no es lo mismo una carrera de 100 km que otra de 5", explicaba el coordinador que reiteraba su compromiso con la seguridad de los participantes.
Las dudas se extienden a otros territorios. En la Sierra de Albarracín, Tomás Almazán, técnico comarcal de deportes responsable del Circuito BTT que aglutina a cinco pruebas durante el verano y que este año ha cumplido su quinta edición, explicaba que "lo más complicado es identificar a los voluntarios. Eso va a ser súper difícil", dijo, y añadió que se preparará un "documento, y llegado el día igual tengo que hacer una modificación. Eso es inviable".
Recorridos vs distancia
Otro de los puntos "calientes" de los requisitos para autorizar la celebración de pruebas deportivas es la consideración de las variantes recortadas de los circuitos como pruebas independientes, precisando así de una tramitación separada y de haciendo complicado no compartir recursos como los equipos sanitarios que atiendan una y otra modalidad. La solución, según explicó el portavoz de la FAC para por hacer un recorrido, sea cual sea su longitud, y que los participantes le den una o más vueltas. Una solución poco respaldada por los organizadores. La formula más eficaz, aunque también la más complicada, es hacer un circuito con dos o más bucles que pasen por la línea de meta, de forma que sea un único recorrido en el que los deportistas complete entero o solo una parte. Una solución ideal, pero de difícil aplicación práctica por la dificultad de muchas carreras de realizar este formato en forma de pétalos de flor.
Este verano la cicloturista dSierra de Gúdar tuvo que anunciar la suspensión de su versión recortada, igual que la BTT de Santa Eulalia, que estableció una meta intermedia en Peracense.
Fuente: Diario de Teruel
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