El Ministerio Público ha solicitado una pena que suma más de ocho años de cárcel para R.S.P. como presunto autor de dos delitos de conducción sin el permiso, otros dos por circular temerariamente y uno más de atentado a agente de la autoridad. El procesado, además,había sido condenado previamente en hasta ocho ocasiones por ponerse al volante pese a no contar con el carné.
Según el escrito de la Fiscalía, el encausado fue privado del derecho a conducir durante trece meses en noviembre de 2011, en virtud de una sentencia que, además, lo condenó a cuatro años y seis meses de prisión. Pese a ello, «el inculpado ha hecho caso omiso sistemáticamente de la citada prohibición sin importante las consecuencias legales», apunta el fiscal.
Así, el 19 de noviembre de 2012, cuando se encontraba en el interior de un turismo en la A-44, que estaba detenido a la altura del kilómetro 399, una patrulla de la Guardia Civil le solicitó la documentación. En lugar de atender la petición de los agentes, emprendió la huida. Se inició, entonces, una frenética persecución que acabó en el casco urbano de Córdoba. Los efectivos decidieron abandonar su cometido para evitar que se produjese un grave accidente.
Poco después, el día 23 del mismo mes, R.S.P. fue nuevamente descubierto al volante de su vehículo y circulando a 104 kilómetros por hora en la A-431, cuando la velocidad estaba limitada a 70. Los uniformados le dieron el alto, pero, una vez más, se fugó, invandiendo el sentido contrario, y logrando escapar de la Guardia Civil.
No obstante, los efectivos policiales consiguieron localizarlo y, de nuevo, el procesado trató de huir a una velocidad desproporcionada y embistiendo a varios coches, incluido el de los agentes. La persecución acabó a pie y el encausado terminó arrojándose al Guadalquivir, «evitando de este modo ser finalmente apresado por los efectivos». El juicio se celebrará mañana jueves, en el Juzgado de lo Penal número 1 de Córdoba. (Información)
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