Más de 300 alumnos, matriculados en distintas autoescuelas de la provincia, han perdido la fecha que tenían prevista para examinarse del carnet de conducir debido a la falta de previsión de la Jefatura Provincial de Tráfico de Alicante. Este año, por primera vez, el organismo autorizó la celebración de estas pruebas durante el mes de agosto. Hasta ahora, el período laboral de los examinadores concluía el 31 de julio y se reiniciaba el 1 de septiembre. Sin embargo, este verano estaba previsto que los exámenes concluyeran el 9 de agosto y se reanudasen el 26 de ese mismo mes, tal y como publicó tráfico en junio.
Una noticia que llevó a los responsables de los centros donde se imparten enseñanzas automovilísticas a planificar las clases con sus clientes adaptándose a estos nuevos tiempos. El problema llegó el pasado viernes cuando Tráfico informó a las autoescuelas –a través de un correo electrónico– que el examen del día 9 se suspendía alegando que "las circunstancias, posibilidades y capacidad del servicio de exámenes no eran las adecuadas". Un aviso que rompió de pleno con la planificación elaborada por las autoescuelas alicantinas durante los últimos meses.
La decisión de Tráfico deja a más de 300 alumnos matriculados en distintas autoescuelas sin fecha de examen. Lo que traerá, por una parte, un sobrecoste a los clientes, así como una pérdida de tiempo. Hay que tener en cuenta que los afectados ya habrían dado todas las clases necesarias para acudir preparados a la prueba y el aplazamiento les obligará a pagar por nuevas prácticas porque la enseñanza debe ser continua, apuntan los expertos. (Seguir leyendo)
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