Tráfico pide sustituir vehículos de más de 10 años cuando el 15% de su flota pasa ya de la década

En noviembre de 2013, la DGT comenzó una campaña para que los conductores con los coches más viejos tuvieran conciencia de que un vehículo con muchos años en las carreteras no era sinónimo de seguridad. Se empezaron a enviar 13 millones de cartas a los titulares de vehículos con más de diez años de antigüedad. En las misivas se advertía de que "el riesgo de que haya al menos un fallecido se duplica en los vehículos antiguos respecto a los más modernos y con mayor equipamiento de seguridad activa y pasiva". El mensaje desde entonces no ha cambiado. Tráfico siempre ha aconsejado que es bueno cambiar de vehículo incluso antes, cada siete años. 

Este mismo año, al hacer el balance de siniestralidad en los cinco primeros meses de 2014, la DGT justificaba el incremento de víctimas mortales "al cada vez más envejecido parque de vehículos", entre otras razones. Los datos de la patronal Anfac revelan que en 2013 el 50,9% de los vehículos matriculados en España tenían más de diez años, cuando ese porcentaje era del 39,4% en 2003. Hoy, la antigüedad media de un vehículo es de 11,3 años, cuando hace una década era de 8,23. Pero en casa del herrero cuchillo de palo. 

La DGT no cumple una de sus principales recomendaciones. La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil tiene actualmente 5.451 vehículos, de los que 1.969 son coches patrullas y 2.507 motos. De todos ellos, 838, el 15,1%, tienen más de 10 años, según acaba de reconocer el ministerio del Interior en una reciente respuesta parlamentaria. En cuanto al kilometraje, el 20% de los vehículos de la DGT tiene más de 200.000 kilómetros y otro 6,4% más de 300.000 km. El porcentaje sube en el resto de unidades de la Benemérita distintas a la DGT. El parque móvil de la Guardia Civil tiene 18.908 vehículos, de los que 5.959, el 31,5%, tiene más de una década. En el cuentakilómetros, el 27,% tiene más de 200.000 kilómetros y otro 7,8% más de 300.000 km.

 El propio ministerio del Interior reconoce que el coche oficial asignado al director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, tiene más de 10 años "y no ha solicitado su reposición". La Guardia Civil tiene otros 102 vehículos para altos cargos de la Benemérita, cuya vida media es de 8 años. 

La DGT solo tiene siete coches "de mando", con una antigüedad media de cinco años. No obstante, Interior reconoce que aunque recomienda al resto de conductores que cambie de vehículo antes de los diez años, en la institución "no existe un kilometraje medio estipulado para retirar un vehículo del servicio". La Guardia Civil solo retira un vehículo cuando presenta averías de gran envergadura y un alto coste de reparación, o cuando no supera la ITV y es necesario "acometer igualmente reparaciones de coste elevado". Se juega con la seguridad de los agentes Si puede y es más económico, la Guardia Civil prefiere reparar que comprar. 

Consecuencia de los ajustes presupuestarios. No hay dinero para grandes renovaciones de la flota, solo en casos puntuales, como la compra este febrero pasado de 26 todoterrenos para la vigilancia de las costas. De hecho, los últimos grandes contratos de la Guardia Civil en los últimos años son para comprar suministros de piezas de recambio, neumáticos y baterías. En julio de este año, Interior sacó a concurso la compra de 51.600 neumáticos para vehículos, 1.400 neumáticos para motos y 8.400 baterías de arranque. Elementos que servirán para renovar la flota en 2015 y 2016. El coste máximo: 7,2 millones de euros. En julio también sacó el concurso para piezas de recambio, que incluye embragues, frenos, amortiguadores, filtros, correas... por valor de 550.000 euros. En mayo otro concurso de 1,5 millones de euros licita "repuestos originales" para las 8 marcas de vehículos que tiene la Guardia Civil. 

El propio director de la Guardia Civil tiene un coche oficial de más de diez años La asociación mayoritaria de guardias civiles, la AUGC, asegura que estos ajustes presupuestarios juegan con la seguridad de los agentes. "Si no es seguro un coche de diez años conducido por un ciudadano normal, que lo cuida y lo maneja menos, cómo será un vehículo de la Guardia Civil, que debe ser más operativo, está en la calle 24 horas, participar en persecuciones y que pasa por muchas manos. Que el 30% de los coches del Cuerpo tenga más de 10 años atenta contra nuestra seguridad. Sin olvidar que muchos vehículos ya no tienen ni extintores", explica un portavoz de la AUGC. La Guardia Civil asegura que no hubo en 2013 muertos en los accidentes en los que se vieron implicados vehículos de la Benemérita. 

El año pasado hubo 1.040 siniestros, de los que en solo 98 los coches accidentados tenían más de diez años. Y de estos 98, solo cuatro tuvieron consecuencias de carácter grave para sus ocupantes. La AUGC recalca que se juega con la seguridad de los agentes. Y ponen como ejemplo el accidente que este enero sufrieron varios guardias destinados a vigilar la frontera de Melilla. Acudían a un aviso de salto de la valla cuando un neumático reventó y el coche dio varios vueltas de campaña. No hubo heridos graves. "El 90% de la flota que patrulla la frontera tiene más de 10 años y supera los 250.000 kilómetros", afirman desde la AUGC.

 En Canarias también ha problemas en las motos, con "tornillos corroídos, frenos en mal estado y emblemas despegados". En Badajoz también hay problemas, con nombres y apellidos: En el destacamento de Zafra hay una furgoneta con 386.000 kilómetros; en el de Mérida, 14 motocicletas con más de diez años; en Don Benito, cuatro coches patrulla con 341.567, 461.570, 469.360 y 485.000 kilómetros. En Villanueva de la Serena, presta servicios un Nissan con 367.000 kilómetros, sin alumbrado en el salpicadero y el asiento del conductor roto; en el Puesto de Siruela, otro todoterreno con 525.000 kilómetros; y en el Puesto de Fuente de Cantos tienen un Nissan con 368.000 kilómetros y otro con más de 358.000 kilómetros.(Información)

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