En los últimos meses, ante la cada vez mayor presencia de elementos tecnológicos conectados en los coches nuevos, son muchos ya los que han comenzado a mostrar su preocupación acerca del potencial peligro que supone para los conductores el riesgo de que su vehículo sea hackeado. Ahora, dos investigadores españoles les han dado la razón.
Javier Vázquez-Vidal y Alberto García han desarrollado el denominado CAN Hacking Tool (CHT), un dispositivo que se instala en los coches y que permite controlarlos a través de Bluetooth en menos de cinco minutos. Después, "podríamos esperar un minuto o un año y luego activarlo para hacer cualquier cosa para lo que lo hayamos programado", explica Vázquez-Vidal, quien trabaja como asesor de seguridad de información y tecnología en Alemania, en una entrevista a Forbes. Así se hackea un coche para conducirlo desde un ordenador.
Pero ambos investigadores quieren ir más allá. Conscientes de que el Bluetooth limita a unos cuantos metros el control del vehículo, García y Vázquez-Vidal están trabajando en un modelo que funcione a través del sistema de radio GSM -el antiguo sistema 2G de cobertura para móviles-, de cara a la presentación del CHT en la conferencias Black Hat que tendrán lugar en Singapur el próximo mes.
Urgencia por establecer protocolos de seguridad
Una vez conectado el gadget al CAN Bus (el sistema destinado a controlar el motor e interconectar la unidades de control electrónico) del vehículo que se va a hackear, es posible tener acceso al control de la alarma, las ventanillas, las luces, el sistema de frenado y del volante a través de un ordenador. "Un coche es una mini red y, por ahora, no hay ningún tipo de seguridad implementado", declara Alberto García.
De esta forma, el dispositivo desarrollado por estos dos investigadores españoles vuelve a incidir sobre las carencias de seguridad que presentan los vehículos a medida que avanza la tecnología conectada a la red, poniendo de relieve una vez más la urgencia de que se apruebe una regulación al respecto que garantice la integridad del vehículo y de sus ocupantes frente a este tipo de amenazas. (Información)
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