Condenan al dueño de animales por poner 34 veces en riesgo el tráfico

La Audiencia Provincial ratifica la sentencia del Juzgado de lo Penal número de 2 Ciudad Real que condenó al dueño de varios animales (cerdos, jabalíes, burros, caballos, ovejas, gallinas ...) por un delito contra la seguridad vial en la modalidad de causar grave riesgo a la circulación. Sus animales campaban a sus anchas por su finca y, según la sentencia, también por caminos y travesías de carreteras poniendo en riesgo hasta en 34 ocasiones el tráfico rodado.

La juez le impuso una pena de doce meses de multa a razón de una cuota diaria de tres euros. El sentenciado recurrió la condena y la Audiencia Provincial ha desestimado el recurso de apelación y confirmado al sentencia.

Según declaró probado la titular de Penal 2 de Ciudad Real, el acusado tiene una vivienda en un camino de Miguelturra donde alberga gran número de animales (cerdos, ovejas, gallinas, perros, burros, un caballo, un jabalí ...) sin las suficientes medidas de seguridad que impidieran que éstos ejemplares pudieran salir de la finca por sí solos y acceder a la vía pública. De este modo, según la sentencia, entre el 6 de febrero y el 16 de noviembre de 2015, la Policía Local atendió 34 incidencias por denuncias de particulares y del servicio de Emergencia 112, en las que se daba parte de la presencia de animales sueltos en la vía pública «generando grave riesgo para el tráfico rodado».

Según consta en autos y recoge la sentencia, el 16 de noviembre del año pasado, sobre las 15.45 horas, dos cerdos de grandes dimensiones propiedad del acusado causaron un grave riesgo para la circulación rodada, estando a punto de provocar un accidente.

El conductor de un vehículo, según la juez, se vio forzado a frenar de forma brusca para no chocar contra los animales. Seguidamente, la Policía Local tuvo que intervenir para apartar los animales hacia la cuneta y restablecer la seguridad en la vía. Unos 20 minutos más tarde, en la travesía de la CM-4127, un jabalí, propiedad del ahora condenado, estaba poniendo en peligro la seguridad de las personas que circulaban en vehículos, volviendo a tener que intervenir la Policía Local para espantar al animal y dirigirlo hacia la finca del procesado.

El rosario de animales sueltos empieza en febrero de 2015 y termina en noviembre. El día 1 de este mes, dos cerdos estaban en la vía pública, el 10 un jabalí en idéntica situación, el 15 este animal volvió a escapar y a invadir caminos y vías, el 14 fue un gorrino el que anduvo suelto, además de varias ovejas. Hasta ocho veces se registraron en noviembre incidencias por animales sueltos, seis el mes anterior, octubre, donde el protagonista fue el asno, las ovejas y de nuevo, el jabalí. En septiembre se denunciaron nueve episodios con rebaños de oveja, otra vez el jabalí y el caballo que siguió el ejemplo de sus compañeros de finca. En agosto, julio, marzo y febrero hubo más de lo mismo.

Fundamentos jurídicos. La Audiencia cree «debidamente acreditado» el delito que castiga a quienes «originaren un grave riesgo para la circulación colocando en la vía obstáculos imprevisibles...». Respecto a la justificación del procesado de que los animales tienen derecho a estar en la vía pecuaria, apunta que «se ha de entender que es para pastores y ganaderos, no para que estén un jabalí o un cerdo».

Fuente: www.latribunadeciudadreal.com