"Los examinadores somos uno de los pilares básicos en la seguridad vial"

Los examinadores siempre han sido, para el alumno, aquella figura a quien temer, quien decide, en última instancia, si estamos preparados o no para obtener el carné de conducir. Estos mismos examinadores se enfrentan a una escena: en varios minutos tienen que saber discernir si un aspirante está realmente preparado o no. De ahí la dificultad y la importancia de su trabajo. La Asociación Nacional de Examinadores de Tráfico, Asextra (fundada en 1997), se encarga, entre otras cosas, de hacer valer esta función.

 

Joaquín Jiménez Murillo lleva 5 años
presidiéndola y es examinador desde hace 25.

¿Cuál es el papel de los examinadores dentro de la formación vial y cuál cree que es el papel que les otorga la sociedad?

J.J.M.: Asextra, desde su creación, viene esforzándose en transmitir a los poderes públicos y a la sociedad en general, la importancia y trascendencia de la labor de evaluación y calificación de las pruebas para la obtención de los permisos de conducción, entendiendo que toda contribución que se haga en este sentido mejorará en gran medida la seguridad vial.

A nadie se le escapa que en gran medida la formación y aprendizaje de los aspirantes al permiso de conducción viene supeditado al examen que hayan de superar. Sigue existiendo la creencia de que hay que prepararse para aprobar el examen, y no preocuparse en aprender a conducir. De ahí la importancia de que el examen sea cada vez más exigente y riguroso en aras de obtener la mejor preparación posible de los aspirantes.

Nuestra labor es fundamental en la formación vial. El examen es necesario en todo el engranaje formativo como manera de valorar el logro del alumno o descubrir problemas de aprendizaje de una forma objetiva. Es la forma de medir el aprovechamiento y el nivel de la enseñanza recibida y ver si el aspirante tiene las condiciones mínimas necesarias para poder circular sin que suponga un riesgo para él mismo o los demás.

La sociedad tiene una percepción en muchos casos equivocada sobre nuestra función. Cuando alguien obtiene el carné, es la sociedad la que le otorga la confianza para desarrollar la actividad de conducir. Esa confianza sólo puede surgir de la valoración que un funcionario público cualificado haga de la aptitud del aspirante.

Afortunadamente para todos, en el desarrollo de esta función el examinador no tiene ningún interés económico, como a veces se piensa en la calle. Es decir, los examinadores no tenemos ningún interés (más que el estrictamente profesional) en que un alumno apruebe o suspenda y eso es algo que debe tener claro la opinión pública. Los examinadores somos un elemento necesario e insustituible en toda la cadena de aprendizaje y uno de los pilares básicos de la seguridad vial. En nuestra condición de funcionarios, garantizamos que las pruebas se realizan con la objetividad necesaria de acuerdo con las normas que nos dicta la Dirección General de Tráfico.

Viendo algunos casos en que los examinadores han sido agredidos por aspirantes que suspenden, ¿se han sentido alguna vez desprotegidos?

J.J.M.: Al desarrollar nuestro trabajo fuera de las dependencias oficiales de la DGT y al dispersarnos en la corriente circulatoria durante el desarrollo de la prueba, a veces nos encontramos desprotegidos ante reacciones violentas. Por ello, llevamos tiempo exigiendo a la DGT diversas medidas tendentes a erradicar este tipo de conductas, entre ellas, que los Centros Médicos realicen un examen psicológico más exhaustivo a los aspirantes, la comunicación diferida del resultado (como se hace en el teórico), el inicio y finalización de las pruebas en un entorno seguro etc. En este sentido, únicamente consideramos como tal a los centros de examen y aquellos puntos de citación preestablecidos que cuenten con servicio de vigilancia, prestado por compañías de seguridad privada o por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad Públicos.

La respuesta de la DGT ante nuestras quejas ha sido la de crear un protocolo de actuación de aplicación de medidas preventivas y de actuación frente a la violencia en el trabajo que consideramos insuficientes, sobre todo, en lo referente a la estrategia disuasoria y por supuesto en la asistencia jurídica. En esta línea, en muchas ocasiones ha manifestado el responsable de nuestro gabinete jurídico, D. Benjamín Cortés Margallo, que no se entiende bien por qué la Dirección General de Tráfico no presta de manera inmediata y sin cortapisas sus servicios jurídicos a sus funcionarios. Lo hace de manera puntual y esporádica y tan solo en los casos graves. Siempre hemos pensado que en esos momentos en los que un funcionario es agredido, incluso de modo leve, debería ser apoyado y defendido por el organismo al que pertenece. Al fin y al cabo, si padece este maltrato, es a causa de cumplir con su trabajo como funcionario público.

En el caso concreto de los asociados de Asextra, saben que siempre tendrán a un abogado para que les defienda y asesore en momentos tan desagradables como estos.

Por tanto, consideramos que la DGT debería mejorar el protocolo de actuación de medidas preventivas y disuasorias, aún reconociendo que a veces las reacciones del aspirante son impredecibles, se ha demostrado que la reacción fuera de lugar la comete el aspirante al escuchar el resultado negativo de la prueba, de ahí que, para evitar situaciones de riesgo, la entrega del resultado debería efectuarse en un entorno seguro.

¿Qué opinión les merece el nuevo examen práctico de conducir? ¿Qué cambios han tenido que realizar ustedes?

J.J.M.: Todas las medidas que tengan como objetivo conseguir mejores conductores nos parece genial, aunque como todo en la vida es susceptible de mejora.

Para conseguir mejores conductores no solo basta con que la DGT, examinadores y profesores de formación vial aporten su granito de arena, sino quizás y no menos importante es que el ciudadano tome conciencia de la responsabilidad que tiene la obtención de un permiso de conducción y cuando vaya a la autoescuela vaya con la idea de aprender a conducir y no con la intención sola y exclusivamente de aprobar un examen. Evidentemente para estos nuevos cambios el examinador se ha tenido que preparar y formar con el objetivo de dar más calidad al ciudadano.

En este sentido, es imprescindible que el examinador cuente con unos principios básicos basados en su preparación y conocimiento, así como en su capacidad tanto de comprensión como de evaluación hacia el examinando.

¿Consideran que el tiempo adjudicado a cada examen es suficiente para evaluar si un aspirante está suficientemente preparado?

J.J.M.: Claro que sí. Otra cosa es que el número de pruebas que el examinador tiene asignado para examinar en su jornada laboral sea excesivo para realizar un examen de calidad. La DGT debe tomar conciencia de que no puede mantener dentro de un vehículo a un examinador prácticamente sin poder ir al baño o simplemente para poder estirar las piernas como así recomienda la propia “Fraternidad” órgano externo, encargado de evaluar la prevención de riesgos laborales de todos los puestos de trabajo de la DGT y, en concreto, también el del examinador.

¿Están satisfechos con la función que realizan los examinadores?

J.J.M.: Por supuesto que sí. Nosotros somos el último eslabón para que un ciudadano se ponga a circular en la red viaria con la responsabilidad que ello conlleva. En lo que no estamos satisfechos es en el poco reconocimiento que tiene nuestro trabajo tanto a nivel de la DGT como de los propios ciudadanos. Hay que reconocer que con la implantación del Anexo VIII del Reglamento General de Conductores (RGC) quizás se nos esté dando un prestigio que habíamos perdido hace mucho tiempo.

Disponen de página web, blog y Twitter ¿Cómo valoran su presencia en las redes sociales?

J.J.M.: Hoy en día, la presencia activa en los medios se hace fundamental y necesaria y así lo hemos entendido desde esta Asociación. Queremos contar con las herramientas necesarias para llegar directamente a todos los examinadores en particular y al público al que servimos en general.

La página web existe casi desde el mismo instante en que se creó la Asociación (www.asextra.org) y el blog (www.asextra.blogspot.com) es un espacio vivo, que desde hace unos meses se actualiza con regularidad y supone un punto de encuentro de información y noticias que nos afectan, tanto desde el punto de vista del examinador como de funcionarios. Además, nos sirve para difundir nuestras opiniones, noticias propias, puntos de vista o toma de postura sobre algún tema que nos pueda interesar directamente y un excelente vehículo para aclarar algún asunto de actualidad en el que nos podamos ver involucrados. También contamos con la cuenta de Twitter ( @asextra ).

 

Entrevista en revista Travesía

Editorial ETRASA