Según nos informan nuestros colegas franceses, dirigentes del sindicato
SNICA-FO, convocante de los paros de examinadores, fueron recibidos ayer lunes
por la cúpula del Ministerio del Interior francés, que tras unas tensas
negociaciones durante la tarde, continuaron la reunión la mañana de hoy.
Finalmente, la Administración ha accedido a prácticamente la totalidad de las demandas de los funcionarios que han estado ocho días de huelga, en
principio indefinida si no eran atendidas sus reivindicaciones. .
El gobierno pretendía amortizar
35 plazas de funcionarios examinadores en todo el Estado. Después de la huelga se ha
conseguido no sólo que no se pierdan esas plazas, sino que hay un compromiso
por escrito que la plantilla será aumentada en 25 efectivos más.
Siguen conservando y haciendo la
totalidad de las tareas que venían realizando, incluído las pruebas teóricas
del permiso de conducir, que era otra de sus solicitudes. Además, se mantienen
las jornadas y cupos de trabajo (se pretendía por parte de la Administración
aumentarlos).
Una cuestión importante es que se
respetan todas las circulares y normativa de aplicación, textos indispensables
para que los exámenes sigan realizándolos los funcionarios de carrera. Se aleja
por tanto el fantasma de la privatización
En cuanto a las indemnizaciones y
dietas, no sólo no se recortan, sino que serán revalorizadas en el 2014 (algo
impensable antes de la huelga).
Nuestros colegas examinadores
franceses están muy satisfechos con el resultado de estos paros después de lo
duro que ha resultado el proceso y sobre todo, después de un año en el que se han sentido
"despreciados y ninguneados" por la Administración. Afortunadamente, este golpe encima de la mesa
ha puesto las cosas en su sitio, de donde nunca debieron salir.
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