Los centros médicos rechazan tests más duros a los ancianos al renovar el carné

El director del Servei Català de Trànsit ha pedido un endurecimiento de los exámenes físicos y psíquicos para los conductores de más de 65 años que quieran ampliar su permiso de conducción

Los centros médicos encargados de tramitar los certificados para la renovación del permiso de conducir se muestran en contra de un endurecimiento de las pruebas para los mayores de 65 años. Este cambio normativo ya se ha planteado en alguna ocasión pero no se ha concretado. El último en pedir modificaciones ha sido el director del Servei Català de Trànsit (SCT), Joan Josep Isern, que la semana pasada instó a la Dirección General de Tráfico (DGT) para que se endurezcan las pruebas para los conductores de más edad, que calificó de «puro ritual administrativo». Actualmente en España hay más de 3,2 millones de personas de más de 65 años al volante.

La petición del director del SCT no ha gustado en líneas generales a los centros médicos encargados de realizar los exámenes físicos y psíquicos que acreditan la óptima capacidad para ponerse al volante. Consideran que los tests actuales son «suficientes», siempre que se hagan correctamente. Las competencias en este sentido son de la DGT, aunque el protocolo a la hora de establecer las condiciones del examen médico están consensuadas con el Departament de Salut de la Generalitat. Desde el SCT, su director Joan Josep Isern, pidió «que ese examen médico tenga las consideraciones de examen médico y no sea un puro ritual administrativo que sirva para pasar un mero trámite burocrático».

Pruebas

En la actualidad, los conductores que presentan un estado de salud óptimo, a partir de los 65 años obtienen la renovación por cinco años. Hasta esa edad, la vigencia es para una década. Los centros médicos realizan un «completo» examen, en opinión de Resurrección Mayor, responsable del Centro Médico Roma de Tarragona. Las pruebas incluyen tests físicos y psíquicos, incluyendo un estudio psicotécnico. Además, hay inspecciones de agudeza auditiva y visual –analizando aspectos como el campo visual o el cromatismo–, un reconocimiento médico o un ejercicio de psicomotricidad, entre otros.

«Los abuelos ya se quejan que hacen demasiadas cosas», apunta Joan Ramon Bonet, médico del Centre Mèdic IV Torres. «Los exámenes ya son suficientes ahora, si se hacen bien. Nosotros seguimos el protocolo del Libro Verde de la DGT y Salut de la Generalitat», asegura Bonet. Para Mayor, la duración de la renovación la marca «el estado de salud del paciente». «Una persona de 65 años puede estar mal y una de 75 estar bien», reflexiona. (Seguir leyendo)

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