Un nuevo caso de agresión a funcionario público
en ejercicio de sus funciones ha sucedido el pasado jueves 5 de febrero en Tudela y
una vez más, en el momento de la comunicación del resultado.
El examinador, que habitualmente presta servicios
en Pamplona, se desplazó junto con el resto de sus compañeros a Tudela,
con el fin de realizar en esta ciudad las pruebas oficiales para la
obtención del permiso de conducir.
En una de las pruebas, durante la comunicación
del resultado a un alumno, el examinador en estricto cumplimiento del
protocolo de exámenes
dictado por la Dirección General de Tráfico, le
explicó al alumno las faltas cometidas y el resultado de "no apto" como
consecuencia de las mismas.
El alumno le dijo al examinador , de forma tranquila, si
no le podía aprobar, a lo que el funcionario le volvió a explicar
las faltas y le dijo que ante ellas, no podía aprobarle. A partir de
ahí, no hubo más palabras. Ambos salieron del coche y por sorpresa y sin
que el examinador pudiera prever esta reacción,
el alumno se fue hacia él y le propinó un violento puñetazo en la cara, derribándolo y tirándolo al suelo debido al fuerte impacto.
El profesor entonces, agarró al alumno y le
inmovilizó al tiempo que reprendía su acción. El examinador mientras,
pudo levantarse y marcharse hacia un centro médico ya que sangraba
abundantemente al haberle reventado el labio. También
se le ha diagnosticado latigazo cervical y estará de baja laboral hasta
que pueda curarse de sus heridas.
Los examinadores de toda España se han mostrado
consternados al saber de esta agresión y nos han hecho llegar numerosas
muestras de apoyo y solidaridad para el compañero agredido al que
queremos transmitir todo el afecto y cariño de sus
compañeros y el deseo de una pronta recuperación.
Por nuestra parte, esta Asociación de
Examinadores de Tráfico va a seguir luchando para que los funcionarios
examinadores no sean obligados a dar el resultado in situ, tal y como se nos impone desde los despachos de la Dirección General de
Tráfico sin saber ni ser conscientes de los peligros a los que nos
enfrentamos los examinadores. A la vista está, que nos jugamos la vida.
www.asextra.org
2 comentarios:
Lamento el suceso, y me reconforta la acción del profesor.
En general, creo que lo más eficaz para prevenir estos inaceptables sucesos radica en la actitud de los profesores respecto a sus alumnos. Desde luego, con esto no digo que la responsabilidad de un acto violento y concreto sea del profesor, pero sí creo que la tenemos en cuanto a exigir unos mínimos de comportamiento y respeto, de modo, que si durante las clases se observan comportamientos agresivos (me resulta increíble, salvo muy raras excepciones, que no se perciban), se haga cuanto sea posible por intentar modificarlos, y si no se logra, habrá que invitar al alumno a abandonar la autoescuela. Con crisis o sin ella. La autoescuela ha de ser también un filtro, ejercer un cierto grado de selectividad cuando sea necesario; no se puede trabajar a cualquier precio. Y, por supuesto, hay que ser extremadamente cuidadoso con la imagen que los profesores proyectamos de los examinadores hacia los alumnos, nuestro respeto hacia los funcionarios no puede tener una sola fisura. El buen ejemplo es imperativo.
Dadas las agresiones verbales y físicas hacia los examinadores, ProVial manifiesta que no comparte este tipo de actuaciones. Somos un colectivo profesional y como tal, condenamos enérgicamente este tipo de comportamientos. Las diferencias se solucionan con el dialogo y la empatía. Nunca se puede justificar un acto violento. En el momento que se recurre a la violencia, se pierde la razón y la honorabilidad. Desde ProVial, inculcamos a nuestros alumnos, las pautas de respeto hacia cualquier usuario y persona, sea del colectivo que sea.
Publicar un comentario